Este 7 de abril,Día Mundial de la Salud, que este año 2020 está dedicado a exaltar la labor del personal de enfermería y de partería, queremos manifestar nuestra gratitud a todos los agentes sanitarios que están en primera línea como verdaderos ángeles en esta tierra Istmeña, ofreciendo sus servicios profesionales a tiempo y destiempo, para garantizar al resto de los habitantes atención médica, en especial en estas circunstancias de la pandemia del COVID-19.
Ustedes nos dan testimonio visible del rostro humano, solidario y fraternal de la atención médica en momentos difíciles, a pesar de poner en riesgo su vida; incluso ya algunos han ofrendado su vida, porque su vocación y su amor a la Patria los animó a la entrega total: «No hay amor más grande que dar la vida por sus amigos». (Evangelio según San Juan, 15 , 13). Estamos seguros que su ofrenda les ha ganado el gozo Eterno.
Ahora más que nunca, que han aumentado los contagiados; que el cansancio por las largas jornadas están haciendo efectos, debemos expresarle nuestra gratitud públicamente para animarlos, para valorarlos; pero sobre todo apoyarlos quedándonos en la casa. Evitando contagiarnos, para que no colapse el sistema sanitario.
Nuestro agradecimiento, especial a sus padres, hijos, esposas y esposos y demás familiares de los agentes sanitarios, por el tiempo en que no están con ustedes.
Gracias enfermeras y enfermeros, que ayudan a recibir una nueva vida, ese milagro maravilloso de Dios que se da en cada nacimiento.
Gracias a todos ustedes, desde la Ministra de Salud hasta el más sencillo trabajador en los hospitales. Dios les bendice por su entrega y vocación.
#YoMeQuedoEnCasa #DiaMundialdelaSalud
† JOSÉ DOMINGO ULLOA MENDIETA, O.S.A.ARZOBISPO METROPOLITANO DE PANAMÁ