Monseñor José Domingo Ulloa en su homilía dominical desde la Catedral Basílica resalta que “Dios lo que desea para todos es la felicidad” y nos invita a preguntarnos: ¿Dónde busco yo hoy la felicidad? y qué espacio le doy a Dios en mi jornada?
Además, el Arzobispo de Panamá, cita al Papa Francisco en su alocución antes del Ángelus sobre la importancia de dedicarle tiempo a Dios que «alivia y sana el corazón y que nos permite que se aumente en nosotros la paz, la confianza y la alegría que nos salva del mal, de la soledad y de la pérdida sin sentido».
Finalmente, nos invita a preguntarnos, ¿qué espacio tiene Dios en mi día? ¿La calidad de mi vida depende solo de mis negocios o de mi tiempo libre? ¿o más bien de mi amor al Señor y a mis hermanos, especialmente a los más necesitados?